Vivir Feliz. (1991). H. Jackson Brown

 

Escribo hoy a modo de conjuro para que el año 2014 sea menos desplaciente en disparates culturales de la índole de los que vieron la luz allá por el año 1991 (por ejemplo, Life's Little Instruction Book. Rutledge Hill Press, 1991), y sin duda mucho tiempo antes, los mismos dislates a los que no pocos periodistas, escritores y profesores han dado pábulo, duplicando así su lesiva existencia.

Consejos «per llogar-hi cadires» de un padre algo más que preocupado por/a un hijo que siguió las cuitas de su progenitor, y ambos se beneficiaron de la insulsa y disminuida inteligencia de la gente de su mundo y tiempo.

 

H. Jackson Brown Jr., no es filósofo, ni maestro espiritual, mas cualquiera diría que el modo de proceder de éstos no le es ajeno, pues como algunos de ellos usa y abusa del discurso del Amo y de los imperativos superyoicos. (El que haya trabajado en publicidad tal vez no sea aquí lo de menos). Por otra parte, cabe imaginar que el Sr. Brown no es una persona trastocada. Quizá, eso sí, un poco asediada. Asediada por una preocupación no menor –desconozco cuál, pese a que su hijo es el aparente objeto de la misma-. Y, por otra parte, todo indica que el Sr. Brown, como antes que él otras personas, vio en la escritura la cura para su ansiedad. El hecho cierto es que llevó al papel sus cuitas al modo que lo hacen los gurús, los amantes de la filosofía práctica, los terapeutas cuánticos, y cuantos olfatean algo que ganar con los mal llamados libros de autoayuda. (La relación entre el atrevimiento y la locura, y sin dejar al margen la ignorancia, no es menos evidente). En resumen, el Sr. Brown, un hombre corriente, se vio llevado a escribir algunos consejos –no uno, ni dos, como veremos- para su hijo cuando éste dejó el hogar familiar por la universidad.

 

¿Qué hizo su hijo? Adam Brown tuvo a su vez otra feliz idea, aunque no menos extravagante que la de su padre –circunstancia que vendría a validar aquello de que todo se pega menos la hermosura-: fotocopió los consejos de su progenitor y los distribuyó entre sus compañeros de universidad.

 

¡Y mire usted que por esas cosas de la sugestiva y nihilista postmodernidad, aquellos consejos no cayeron en saco roto! Tanto es así que una editorial pidió autorización al Sr. Brown para editarlos. Poco tiempo después, ampliado y con el título Vivir Feliz, (Life's Little Instruction Book. Rutledge Hill Press, 1991), aquellos simples, estrambóticos e imposibles de cumplir consejos paternos se convertirían en un best seller. (Son decenas las ediciones del mismo, que pueden leerse en distintos idiomas).

 

Pequeño libro de instrucciones para ser feliz:

VOLUMEN I

1. Felicita a tres personas cada día.

2. Ten un perro.

3. Observa el amanecer al menos una vez al año.

4. Recuerda los cumpleaños de los demás.

5. Nunca menciones estar a dieta.

6. Ten un apretón de manos firme.

7. Mira a la gente a los ojos.

8. Di "gracias" a menudo.

9. Di "por favor" a menudo.

10. Aprende a tocar un instrumento musical.

11. Canta en la ducha.

12. Utiliza la plata buena.

13. Aprende un truco de cartas.

14. Planta flores cada primavera.

15. Ten un buen equipo de música.

16. Sé el primero en decir: "Hola".

17. Vive por debajo de tus posibilidades.

18. Conduce coches baratos, pero posee la mejor casa que puedas pagar.

19. Compra libros grandiosos, incluso si nunca los lees.

20. Perdónate a ti mismo ya los demás.

21. Aprende tres chistes blancos.

22. Limpia tus zapatos.

23. Usa hilo dental.

24. Bebe champán sin ninguna razón.

25. Pide un aumento de sueldo cuando sientas que te lo has ganado.

26. Si peleas, golpea primero y golpea duro.

27. Devuelve todo lo que pidas prestado.

28. Enseña algo.

29. Estudia algo.

30. Nunca compres una casa sin chimenea.

31. Compra todo lo que los niños venden en los mercadillos de sus patios delanteros.

32. Una vez en tu vida se dueño de un descapotable.

33. Trata a todo el mundo como quisieras ser tratado.

34. Aprende a identificar la música de Chopin, Mozart y Beethoven.

35. Planta un árbol en tu cumpleaños.

36. Dona dos litros de sangre al año.

37. Haz nuevos amigos pero aprecia a los antiguos.

38. Guarda algunos secretos.

39. Haz muchas fotos.40. Lleva a un niño al zoo.

41. No pospongas la alegría.

42. Escribe de vez en cuando notas de agradecimiento.

43. Nunca te rindas ante nadie. Los milagros ocurren todos los días.

44. Muestra respeto por los profesores.

45. Muestra respeto por los agentes de policía y bomberos.

46. Da gracias antes de cada comida.

47. No pierdas tiempo aprendiendo los "gajes del oficio". En su lugar, aprende el oficio.

48. Mantén un estricto control sobre tu temperamento.

49. Compra verduras de los camiones de los agricultores que se anuncian con carteles escritos a mano.

50. Cierra el tubo de pasta de dientes después de usarlo.

51. Saca la basura sin que te lo pidan.

52. Evita la exposición excesiva al sol.

53. Vota.

54. Sorprende a tus seres queridos con pequeños regalos inesperados.

55. Deja de culpar a los demás. Asume la responsabilidad de cada área de tu vida.

 

Y así hasta 511 consejos.

 

Contra tan improcedentes, trasnochados e inoperantes consejos, vaya por mi parte una recomendación: lean al menos la pequeña gran joya de don Miguel de Unamuno, Amor y pedagodía. (Santiago Valentín Cam. Barcelona: 1902).

 

Girona, 28/12/2013

José Miguel Pueyo